Los huertos compartidos son una característica de las ciudades de toda Europa. Ya sea que se llamen huertos, jardines comunitarios o parcelas de hortalizas, posiblemente haya uno cerca de ti ahora mismo. ¿Cuál es el potencial de estas parcelas de bolsillo para favorecer la biodiversidad? ¿Pueden nuestros jardines compartidos ser una especie de oasis urbano? Eso es lo que esperamos explorar con NaturaShare, y te invitamos a acompañarnos en este viaje.
Una cosa es segura: en los últimos años, las ciudades europeas se han involucrado cada vez más en la producción agrícola local. Una parte de esta producción agrícola es la horticultura profesional, pero los huertos gestionados colectivamente y mantenidos por los ciudadanos también desempeñan un papel importante en la agricultura urbana.
La producción local acorta las cadenas de suministro y favorece una mayor independencia alimentaria, pero ¿qué significa para la fauna y la naturaleza de la ciudad? La biodiversidad en las ciudades es crucial para todos nosotros, ya que ofrece beneficios en términos de polinización, gestión del efecto del calor y actividades recreativas y culturales. Exploremos juntos la biodiversidad urbana a través de nuestros huertos compartidos.